O nos salvamos todos o no se salva ni Dios.

Un bicho imperceptible a los ojos ha cambiado el mundo, vivimos una pandemia que ha trastocado mucho de nuestra forma de vivir, y sin embargo ha dejado intactas las estructuras económicas y productivas que nos hacen vulnerables a seres que ni vemos, ni tocamos, ni olemos, ni oímos.

Tiempos raros, esta década de los 20 de este segundo milenio.

Filomena visitó el centro de la península en los primeros días del año, y nos volvió a encerrar porque la nieve es ya un agente extraño en nuestras vidas, pero alguno nos divertimos.

Pronto llegaron vacunas contra el covid, el asalto al Capitolio y la patada del pueblo americano a Donald Trump.

China eliminó la malaria, y parece ser que una vacuna contra el VIH pudiera estar en ciernes.

Kamala Harris, una mujer y afroasiática se ha convertido en la primera vicepresidenta de la historia en Estados Unidos. Esos Estados Unidos que han entregado al pueblo de Afganistán a los Talibanes.

La Cumbre del Clima en Glasgow no avanzó lo suficiente pero por primera vez habla de descarbonización y de reducir subsidios a los combustibles fósiles. y el crecimiento de las energías renovables ha alzando un nuevo récord global.

La Red Sanitaria Pública Española no cuenta con médicos que practiquen abortos, son casi todos objetores de conciencia, como en Murcia o en Madrid. Ese Madrid de Isabel Díaz Ayuso en el que los sanitarios y sanitarias no quieren trabajar y se han convertido en boicoteadores.

Pablo Iglesias dejó la política activa y la vicepresidencia del gobierno, y un volcán erupcionó en La Palma.

El gobierno social comunista de España logra por primera vez en la historia del país un acuerdo con todos los agentes sociales en la Reforma Laboral, y también por primera vez se ha celebrado una Cumbre Comunista en el Vaticano.

El covid ataca de nuevo porque las vacunas solo llegan al primer mundo, y aun no hemos entendido que o nos salvamos todos o no se salva ni Dios. Las farmacéuticas si lo saben, pero nosotros aún no.

¡Ay! y se nos fue Almudena Grandes, sin darle tiempo a enterarse que el pueblo hermano de Chile, abrió la ventana a la esperanza.

«Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor». Salvador Allende

Felices Fiestas, Felices Días, Feliz Vida.