El director de Protocolo de Izquierda Independiente publica una carta abierta en respuesta a las «falsas acusaciones de una excompañera resentida»

El director de protocolo de Izquierda Independiente publica una carta abierta en respuesta a "una excompañera resentida"

La concejala de Cultura, Miryam Pérez Meliá, ha abandonado el Grupo Municipal de Izquierda Independiente, pero podría continuar siendo concejala de Cultura como «concejala no adscrita». El abandono de Pérez Meliá ha desencadenado todo un terremoto político en San Sebastián de los Reyes -que está gobernado por un tripartito, PSOE, II, Ganemos-, pero quizá ha sido en el seno de Izquierda Independiente donde peor ha sentado la renuncia de la edil (renuncia exclusivamente a continuar formando parte del Grupo que lidera Rubén Holguera). Esloquehay reproduce a continuación la carta abierta que ha escrito el director responsable de protocolo de Izquierda Independiente, Juan Torres, con motivo de todo lo sucedido. La carta lleva por título «Reflexión ante las falacias de Miryam Pérez». [En la imagen, de izquierda a derecha, Torres, Belén Ochoa, Rubén Holguera, Pérez y Miguel Ángel Fernández].

«Recuerdo que de joven, cuando jugaba a ser un revolucionario que se quería comer el mundo, cuestionaba constantemente a mis mayores su tibieza ideológica, incluso a algunos con muchos años de luchas por la democracia. Esas mismas personas me decían que la edad te ayuda a gestionar las frustraciones, las iras y decepciones. Efectivamente, ahora que estoy cercano a la cincuentena noto las huellas del tiempo en mi coraza de joven revolucionario que quería cambiar el mundo en aquella ciudad dormitorio de Barcelona construida con el esfuerzo de unos vecinos y vecinas capitaneados por un cura comunista elegido alcalde. Crecí de la mano de aquel cura comunista, y de aquellos vecinos que el domingo por la mañana cogían sus adas para construir campos de futbol para los chiquillos del barrio, (con esos maestros y maestras). Con esos ejemplos no es ningún merito tener conciencia social ni interesarse temprIanamente por la política, pero sobre todo no es raro aprender compañerismo y lealtad.
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Desconozco la trayectoria personal y presupongo el compromiso social de Miryan Pérez, pero a estas alturas de mi vida lo que sí tengo claro es la mía y me supone una pena enorme tener que salir a desmentir las insinuaciones y falsas acusaciones de una excompañera resentida. En numerosas ocasiones he tenido ofrecimientos para ir en candidaturas electorales y nunca las he aceptado excepto en las elecciones municipales de mayo del 2015 que dije sí al ofrecimiento de los amigos y amigas de Izquierda Independiente. No era afiliado al partido y, al igual que Miryam Pérez, me presenté como independiente; entonces tenía, y ahora sigo teniendo, un sentido claro de agradecimiento a los hombres y mujeres de Izquierda Independiente, a sus dirigentes y a sus simpatizantes, a esos que durante muchos años han ido construyendo un proyecto político de izquierdas creíble y comprometido y que de la noche a la mañana confiaron a un simple conocido su representación, su nombre y su credibilidad. Yo tenía claro que mi independencia estaba supeditada a la lealtad, a la confianza y al compromiso político de esas personas que confiaban en mí sus sueños y sus esperanzas políticas. Recuerdo perfectamente la llorera que me entró el día que fui elegido número 5 de la candidatura cuando, en aquella Asamblea, me preguntaron qué pensaba. Ya he dicho antes que mi coraza sentimental se debilita a medida que me encamino a los cincuenta. Y yo lo que sentía aquella tarde de primavera era GRATITUD Y CONFIANZA. Qué pena que Miryam no haya sido capaz de disfrutar esto.

Apreciada Miryam, he podido ser concejal alguna vez, la propia Izquierda Independiente me lo ofreció hace 5 años, sencillamente rechacé todas las propuestas. No necesito ser concejal para tener el cariño y reconocimiento social, lo noto en muchos y muchas de mis vecinos y vecinas, en mis compañeros de trabajo, en las mujeres de la asociación de vecinos, en las abuelas de Cáritas cada vez que les llevo una caja de comida de las que hemos recogido y en muchas otras personas de otros ámbitos sociales, especialmente uno que tú conoces y que yo por respeto no quiero mencionar aquí. Incluso lo he notado en ti cuando el pasado 27 de noviembre me regalabas, para mi cumpleaños, el libro “La Nueva Educación” con una dedicatoria preciosa: “Entre todas las personas que creemos en otro modelo educativo, sembraremos unas semillas para la mejora de nuestro sistema. Gracias por tus semillas. Un abrazo, Miryam” . Es una dedicatoria encantadora y esperanzadora pero un poco rara para el componente de un grupo acosador, extorsionador, explotador y el resto de calificativos que nos dices directa e indirectamente en tu carta.

Con la humildad de un jornalero andaluz mi padre siempre me dijo que no dijera mentiroso a nadie, por eso te digo que te equivocas y que no dices la verdad. Es fácil difamar y más a representantes políticos, pero te digo que eso está feo y sobre todo lo está inventarse embustes, lo hagas tú o alguien que te haya ayudado; feo es no decir la verdad de aquellos que te dieron la oportunidad de servir a la ciudadanía y de paso, por qué no decirlo, conseguir un sueldo público.

No creo que sea bueno entrar en una escalada de réplicas y por eso no voy a hablar con pelos y señales de tus acusaciones de corrupción de un representante de la oposición y de determinadas delegaciones (ninguna de Izquierda Independiente) ni de las supuestas pruebas que de éstas decías tener, por eso solo te puedo decir la pena que me producen las falsas acusaciones. Me duele especialmente la que haces referente a que me llamaste en julio para decirme que dimitirías en Diciembre y que querías “prepararme” para que entrara yo y de que no te convencí para que no dimitieras. Efectivamente me llamaste un día de julio, quizás uno de los días más tristes de mi vida, y con toda la pena del mundo te contesté que la política hay que tomarla con calma, que lo pensaras y que ya hablaríamos. Recuerdo que no te quejabas solo de Izquierda Independiente, también del alcalde y del resto de concejales. Sabía perfectamente que no dimitirías y así se lo dije a Rubén, pero francamente en aquel momento en el que estaba enterrando a mi hermana me importaba una mierda, con perdón, la política municipal del mundo mundial.

No puedo entender que digas que desde mayo de 2015 (mismo mes de las elecciones municipales) estás molesta y acosada. Sencillamente nadie puede entender que estés así y no renuncies a estar en la lista, a no presentarte o a dimitir antes de la constitución del ayuntamiento en junio de 2015. ¡Ah! la Asamblea del 22 de diciembre pasado no fue para expulsarte (te han asesorado e informado mal) era para hacer balance del año y para tomar una copa de Navidad.

Tendría muchas más cosas que decir pero no me merece la pena, solo decirte que cada día tengo más presente las enseñanzas de aquel cura comunista de mi pueblo: su honestidad, su entrega, su sacrificio por los más desfavorecidos y la confianza, desde su independencia, en que algún día colectivamente construiremos un mundo mejor. Te deseo una vida placentera y plena.

Gracias a Izquierda Independiente por la confianza que depositaron en mi, a sus hombres y mujeres por su cariño, su compromiso y su honradez. Y sobre todo GRACIAS RUBÉN POR TU CLARIDAD, TU AMISTAD Y TU INTEGRIDAD, ten seguro que pese a las adversidades seguiremos soñando un Sanse mejor». Fin de la carta.

Las mayúsculas son del autor, Juan Torres.

Aparte de ser Director Responsable de Protocolo y del Apoyo a las Áreas de Cultura, Educación, Infancia y Juventud de Izquierda Independiente, Torres ocupó en las últimas elecciones municipales el puesto número cinco de la candidatura de II. El partido que lidera Rubén Holguera obtuvo cuatro concejales entonces: Holguera (número 1 de Izquierda Independiente, y hoy primer teniente de alcalde); Belén Ochoa (2); Miguel Ángel Fernández (3); y Miryam Pérez (4).