Alerta climática en los municipios

Vivimos en una era de cambio del clima sin precedentes que tiene su origen en la quema sistemática y creciente de combustibles fósiles a nivel global desde la era industrial. Esto ha provocado el aumento en la atmósfera de gases de efecto invernadero que retienen el calor que recibimos del Sol haciendo que la tierra aumente su temperatura media. Este aumento trae consigo más episodios de sequía, inundaciones, huracanes, elevación del nivel del mar por deshielo del Ártico, nuevas enfermedades y resurgimiento de otras desaparecidas entre otros fenómenos, que hacen y harán más difícil la vida del ser humano en la tierra. Estos cambios afectarán de manera más sensible a niños, ancianos, personas con enfermedades crónicas y a los sectores de población con menos recursos.

Los municipios no son ajenos a los nuevos problemas climáticos, no solo sufren pérdida de biodiversidad sino al igual que en todo el país una disminución de las precipitaciones y un aumento de olas de calor en época estival.
 
Los municipios tienen y deben de estar mejor preparados para afrontar estos episodios que irán sucediendo de forma más frecuente en el tiempo a la vez que tendrán que implementar medidas para hacer menos graves estos cambios. 
 
Esta realidad urge a la declaración de los mismos como territorios en alerta climática y la aplicación de medidas para la reducción progresiva de emisiones de CO2 a la atmósfera. Entre otras el desarrollo de un plan de reforestación que complemente la eliminación de estos gases y la creación de una oficina de Medio Ambiente y Energía con el objetivo de facilitar a la población información y ayuda en la gestión con todo lo relacionado con estas materias.
 
David Hernández Fuster
Equo