Esporádic@s

Muero cada minuto de vergüenza.

Dicen los medios: «combustible para poder operar en hospitales o para hacer pan…» Yo diría morir o morir, morir desangrado o morir de hambre, de sed. Y eso es morir físicamente, y mientras mueren poco a poco de hambre, mueren golpe a golpe de pena, de rabia, de miedo, de dolor, de hastío, de vergüenza […]

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¿Y si nos sumamos?

Soy una ciudadana que vivo de mi trabajo, no tengo rentas, ni activos financieros, ni arrendamientos de inmuebles… mi nómina determina mi calidad de vida, soy trabajadora. Dos clases hay en este tiberio de sociedad en la que vivimos: Los que trabajan y los que viven del trabajo de otros, no hay más, así reza

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Dejadnos la esperanza

Dos días después, o tres, recién terminadas las elecciones afloran las mentiras, pero tú y yo ya nos las comemos. Como se las comen las familias de 10.000 niños y niñas de Madrid que no tendrán plaza en las escuelas infantiles públicas de la capital, las que gestiona Almeida, y se las comerán todos los

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¿Qué preguntar a quienes tienen que preguntarnos?

De interrogantes van los días, y es que “preguntar” es un inicio del saber, preguntar es un motor de búsqueda, un empujón vital. Apenas aprendemos a hablar las preguntas agolpadas en ese tiempo de curiosidad y difícil comunicación salen disparadas en todas direcciones, porque conocer el mundo implica muchas, muchas preguntas, y sobre todo, mucha,

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1460 días

Mayo ya llegó, terció y casi canea. Con su primer y segundo día festivos, con sus flores, el día de la madre, este calor impropio, y ahora este fresco inoportuno, y su carrera electoral. Cada cuatro años mayo nos cita en las urnas y pone en nuestro tejado el nuevo dibujo de representantes y representaciones

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